Oh Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Te
adoro profundamente con todos los poderes de mi alma y
te agradezco de todo corazón por las apariciones de la
Santísima Virgen en Fátima a través de las cuales se
manifestaron en el mundo los tesoros del Inmaculado
Corazón. Por los méritos infinitos del Sagrado Corazón
de Jesús y a través de la intercesión del Inmaculado
Corazón, te imploramos, si es para tu mayor gloria y el
bien de las almas, que nos alcances por la intercesión
de los beatos Jacinta y Francisco la gracia que te
imploramos.
Padre nuestro. Ave María. Gloria.